martes, 27 de julio de 2010

The "Shadow"

Wow, necesito un consejo, pero no ese consejo de la persona que lo sabe todo, y que conce a los involucrados, no. Necesito un consejo... "puro" por así decirlo... ¿Cómo...? ¿Cómo es posible que aún me sigas doliendo? Después de todos esos momentos, de todos esos "ciclos" que pasamos... Es miedo... dices que no confío en ti... puede ser, pero hay puntos... puntos en los que espero una pequeña abertura para poder entrar y "sentirme protegida" pero no están, o no los veo... y ahora, ahora ¿Cómo se supone que confiaré en ti si es que me ignoras siempre?... Vamos! Por favor! Dime si te duele como a mí, si te importa como a mí, si la cobardía te hace, al igual que a mí, frenarte en los momentos de valentía... No, eso no, no tienes nada de cobarde... Me alegra saberlo... Si lo supiera... Podría cargar con esto con más optimismo, con la esperanza de un mañana soleado... Pero no te puedo predecir... Cambiaría en algo el darte algo a destiempo? Será tanto el odio, el rencor guardado en estos meses que no aceptarás mis disculpas, mis titubeos al intentar entablar una conversación? No lo sé y... Eso me aterra. Además... La envidia que siento por otra persona no ayuda en nada a superar esta basura de miedo que tengo... aahh... Sólo quisiera que todo volviera a ser como antes... Como cuando nos divertíamos juntas, cuando teníamos dos temas de conversación, cuando me tomabas del brazo, cuando te reías de las estupideces continuas que decía... Cuando me hacías callar, cuando me ayudabas, cuando me hacías sentir mal, aunque eso en realidad fuera preocupacion, eso... Eso lo sé muy bien... O sabía... He estado buscando ese tono, ese gesto, esa mirada que me lo indicase pero... No la encuentro y... Me estoy desesperando porque siento que te estoy perdiendo yeso es lo úlimo que quisiera... No sabes cuánto te extraño...
Por ti y otra persona más... Sólo por ustedes dos no pude disfrutar mi día... Está vacío sin ustedes... Eso, la verdad, es de mi exclusiva culpa, ¿quién me manda a acordarme de ustedes? ¿quién me manda a darme cuenta de lo que me pasa, buscarle una solución y, encontrarla? ¿Para qué? Si ese el precio del conocimiento yo... No sé si la ambición de conocimiento pueda más que mis ganas de no sufrir...

No hay comentarios: